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13 de mayo de 2025
La Poeta de Villanueva de Córdoba, Araceli Fernández León ha recibido este domingo el premio Solienses en su XVI edición por su poemario Cantar para nadie, en un acto que se ha celebrado en el refugio antiaéreo de la Plaza de España de su pueblo nata y acompañada por numerosos escritores premiados en años anteriores.
Previo al acto de entrega, el director del Blog Solienses, Antonio Merino, ha inaugurado una exposición, en la antigua audiencia, que recoge las 14 Fotografías de cada uno de los galardondos con anterioridad, en cuyo acto se ha tenido un especial recuerdo a la figura de Jose Luís Blasco, ganador del 2024 y que nos dejó tres meses después de haber recibido este galardón, acto que ha contado con la presencia de su viuda. En su Memoria, el profesor José Ruiz hacía una lectura escenificada del poema Eucalipto, de Alejandro López Andrada, escrito expresamente para el acto y recordando las vivencias de ambos escritores de Villanueva del Duque: «Te veo sentado bajo los eucaliptos, sonriendo a pocos metros de la esquina donde dormita el sol….»
Antonio Merino abrió el acto de entrega destacando el trabajo conjunto en favor de la cultura y las emociones que despiertan nuestros autores y autoras de los Pedroches a través de sus escritos y la difícil tarea de los miembros del jurado para determinar y decidirse entre las tres obras finalistas, en esta ocación, tres mujeres que cualquiera de sus poemarios hubiera sido merecedor de premio, un galardón que distingue al mejor libro escrito por un autor/a de la comarca de los Pedroches durante el año anterior.
En nombre del jurado, la profesora de Literatura Antonia Sánchez, definió la poesía a través de autores como Juan Ramón Jiménes, Federico García Lorca o en su libro «La poesía no interesa abolutamente a nadie, y lo diré una vez más para que me queden vivos los poetas españoles, la poesís está muerta y enterrada, pero yo la seguiré escribiendo, porque es la única forma que tengo de bendecir la vida», palabras de Manuel Vilas en el Libro titulado El Mejor Libro del Mundo. Indicó que Cantar para nadie nos regala una experiencia en cada verso, desde la madurez personal y creativa de su autora al referirse al pasado desde el que venimos y la certeza de donde estamos, con referencias a la rutina, a las personas importantes en la vida, a la creación, a los ritos y hasta el sacrificio por los lectores.
Araceli Fernández León destacaba en su intervención los recuerdos que traen a su memoria el lugar donde recibe este premio, el refugio antiaéreo, en que uno de los miembros de su familia, el Padre Pedro León, recibió el bautismo de manos de su madre, con agua de un charco de este lugar, a quien dedica en su libro un poema y al que finalmente dio lectura, antes de recibir el premio, consistente en un Arado Romano en miniatura, obra de la asociación de artesanos de la comarca Ofiarpe, cuyos miembros también acompañaron a Antonio Merino en la entrega del reconocimiento.
La galardonada agradeció este premio a su poemario, con el que también obtuvo el Premio Internacional de Poesía José Zorrilla. Araceli reconoció que «llegué tarde a la poesía pero ya no me quiero ir y me siento felizmente condenada a seguir escribiendo».
Resumió su poemario Cantar para nadie, centrando sus poemas en la familia, en las experiencias vividas con el paso del tiempo y su amor por la literatura.
El alcalde de Villanueva de Córdoba, Isaac Reyes, agradeció la elección de la localidad para su celebración, ofrecimiento que le había hecho a Antonio Merino tiempo antes de conocerse a nuestra paisana, Araceli Fernández, como ganadora del premio Solienses.
La Nota Musical para cerrar el acto la puso el compositor y cantautor pozoalbense Titín, que interpretó varias canciones.